lunes, 29 de abril de 2013

Kaengsaeng 88

Perro ladrador, poco mordedor.

No sólo el país del Sol naciente se dedica a la copia indiscriminada deautomóviles, sus camaradas norcoreanos, tienen la misma fotocopiadora.

La reciente escalada militar ocurrida en la península coreana, ha vuelto a colocar a Corea del Norte en los periódicos internacionales, relevancia lograda a través de las bravuconadas plasmadas en amenazas nucleares, más inventadas que reales.

A pesar con contar con el mayor ejercito de todo el planeta, la República Democrática de Corea del Norte, cuenta con el quizás más reducido número de automóviles que cualquier estado tenga en el momento actual, la razón no es otra, que la importación, compra o fabricación de automóviles civiles está totalmente prohibida en este país gobernado con puño de hierro.
A pesar de estas restricciones – obligadas por la comunidad internacional en algunos casos – los gobernantes norcoreanos decidieron demostrar su poderío industrial, fabricando uno de los coches más peculiares que se recuerda, el Kaegsaeng 88.
Kaengsaeng 88
En la década de los 80´S, saltándose cualquier prohibición o embargo internacional, la cúpula militar y política norcoreana, logró hacerse con varios modelos Mercedes 190E para un único fin, su completa y total desarme para su posterior falsificación en suelo coreano.
Si el modelo 190E se caracterizaba por pasar sus primeros años de uso en territorio europeo y norteamericano y su vejez – o madurez – en las difíciles carreteras sudamericanas e incluso africanas, respondiendo con muy alta nota a las pruebas que eran sometidas en carreteras sin asfaltar, recambios piratas y un casi nulo mantenimiento, la copia asiática, dejaba mucho que desear.
Pyenghowa Motors Hwiparam
El pequeño de la clase E de Mercedes tenía un potente motor alemán y unos acabados acordes con su estrella, por el contrario, el Kaegsaeng 88 – también llamado Paektusa, Paekdusa, Pyongyang 410 ó 4.10 – montaba un viejo motor soviético, no disponía de espejo del lado derecho, las puertas estaban sin sellar, las ventanas ni subían ni bajaban y los filtros de polvo eran inexistentes.
A pesar de las pequeñas taras con las que venía el modelo 88 – indicador del año de su producción – el vehículo fue presentado como un logro nacional en la Feria del Automóvil de Pyongyang de 1988, siendo quizá el único automóvil fabricado, cuya pintura se basaba en pintura para hogares.
Como todo estado totalitario de carácter comunista, la propiedad estaba prohibida, quedando el estado como único propietario de toda la producción y responsable de su alquiler, reservado únicamente a agentes del partido y familias influyentes del estado, obteniendo el privilegio de poseer un coche sin aire acondicionado ni calefacción, pero en un país en que el medio de transporte más común es la bicicleta, la cual estuvo prohibida hasta no hace mucho tiempo.
Un Mercedes low cost.

Galería: Google

No hay comentarios:

Publicar un comentario